The Hunger | Vampiros ochenteros a ritmo de clip

Hay que reconocer que siempre está bien recuperar películas antiguas para verlas por primera vez en plan virginal. Este es el caso de una que podíamos decir que es bastante peculiar: The Hunger (Tony Scott, 1983)

El trío protagonista no puede ser más atractivo Catherine Deneuve, Susan Sarandon y David Bowie. Como se suele decir cada uno de su padre y de su madre, que se meten en una aventura donde la gran protagonista es una vampira llamada Miriam, interpretada por Catherine, que tiene miedo a vivir sola toda la eternidad por la que se busca cómplices para compartirlo pero ¿Y si todo lo que promete no se puede cumplir? ¿Si hay algo que no encaja para conseguir esa felicidad eterna en compañía?

Con esta premisa nos encontramos con The Hunger donde se veremos una historia donde encontramos: amor, pasión, obsesión y recuerdos del pasado en una película que se convierte en una mezcla de géneros, entre terror, romántica y fantástica.

Con un look ochentero, que parece sacado por momentos del Total Eclipse of the Heart de Bonnie Tyler, sobre todo esos momentos vampiros evocadores, nos encontramos ante esta curiosidad de peli ochentera.

John (David Bowie) es un personaje relativamente breve pero importante para saber que es lo que sucede con la misteriosa e hierática vampira, Susan Sarandon (aquí en el papel de Sarah) no se quedó contenta con el surrealismo The Rocky Horror Picture Show y decidió que una película como esta quedaría bien en su filmografía enseñando los pechotes en un par de ocasiones de forma generosa, mientras que Catherine Deneuve (Miriam) es la elegancia personificada y cualquiera se dejaría morder por ella.

Tony Scott, podemos decir que fue un director variado: Desde clásicos como Top Gun, Amor a quemarropa, o El último boy scout hasta Superdetective en Hollywood 2, o el vídeo One more try de George Michael. Abandonó el mundo terrenal el año pasado. Descanse en paz.

Sí, The Hunger no va a pasar a la historia de las grandes películas pero tiene una combinación de elementos bastante curiosa, partiendo del trío protagonista, es entretenida y ese concepto, por momentos de videoclip, hace que sea de un visionado necesario.

Gracias a Coque, el cual ya en su día me hizo ver películas como Clue, o Hedwig and the Angry Inch y ahora esta peli tan curiosa.