24 de junio de 2013

Mika | Celebrando el buen rollo


Hacía tiempo que no hacía cola en plan fan, sin serlo, y además en la mítica sala La Riviera de Madrid, lo que recuerda a Scissor Sisters en 2007 de los que me volvería fan tras verles en directo y que además hicieron otro conciertazo también en este mismo lugar el año pasado. Pero estos conciertos se acaban convirtiendo en algunos de los más divertidos. Allí estábamos esperando unas horas, conociendo a gente interesante en la espera, charlando de todo, arreglando el mundo y, también, poniéndolo a parir.

La noche del domingo Mika presentaba, por segunda vez, su último disco The Origin of Love (Casablanca, 2012) en España con motivo de un concierto patrocinado. El día anterior lo hizo en el Razz de Barcelona y esa noche de final de semana le tocaba en la capital, una buena oportunidad de descubrir a LA felicidad hecha concierto y más cuando, casi por sorpresa, la apertura de puertas ¡se adelantó un cuarto de hora!


Antes de llegar a el momento en el que Mika y su banda hicieran aparición en escena nos encontramos con Bluestain, ganadora de un concurso de bandas, actuó durante una media hora delante de un público entre el que contaba con una buena parte de seguidores entregados a sus temas. Un sonido retro de grupo de los noventa comerciales nacionales por momentos y a otro con un rollo americano, sin llegar al country, bastante entretenido. Realmente nos inspiraban mucha ternura porque se les veía con esos nervios de emoción subidos sobre el escenario. Nos contaron que se encuentran preparando canciones de su próximo disco, habrá que escucharlos con más detenimiento.

Tras Bluestain con una puntualidad británica comenzando a las 21:30h., como él mismo había anunciado en sus redes, empezó el concierto de Mika que se pudo seguir en streaming. La puesta en escena era una especie de feria de abril, que combinaba con la vestimenta del grupo de un París de comienzo del siglo XX, llamadle ecléptico, original o peculiar,  presidido el escenario por un enorme piano en el que Mika no sólo tocaría, sino que se subiría y saltaría sobre él sin tener ningún sobresalto ni desagradable sorpresa.


El setlist fue una perfecta elección. Arranco con uno de sus singles de éxito el Relax, take it easy -Una canción que podría hablar del sexo anal- para ir recorriendo temas de sus tres discos, alternando Blue eyes (del segundo) con Popular (del tercero) o Billy Brown (del primero), y así con todo el resto de temas, Blame it on girls, llegó, por ejemplo, lleno de palmadas.

Uno de mis descubrimientos fue Love you when I'm drunk (podría ser realmente la contrapartida del You only tell me yoy love me when you're drunk de los Pet Shop Boys) que en directo suena mucho más pegadiza que en la versión de disco y a la que le están pidiendo a gritos unos remixes para la discoteca. Como curiosidad las frases del estribillo las cantó en español traduciéndolo como "Sólo te quiero con una copa de más" como ya había hecho en la anterior gira española.



No faltó Rain, que también se volvió más discotequera para el directo, Origin of Love, que demuestra todo el amor que tiene Mika y el buen rollo que transmite al hablar, la mayor parte en español, que te dan ganas de abrazarle y llevártelo a tu casa una temporada. Stardust pasó del estilo bailable del disco a un momento balada para este show, seguido de Underwater, que fueron cuasi los dos únicos momentos relajados del concierto, y en éste último casi de concentración cuando hizo que todos los presentes cerráramos y cantáramos con él.

A partir de este momento comenzó el fiestón absoluto que encadenó éxito tras éxito bailable: desde el Big Girl (you're beautiful) que comenzó a cantar al piano en una particular traducción al castellano, Celebrate, uno de los éxitos del último disco que habla de rupturas con toda la felicidad del mundo, Live your life, del anuncio de cerveza que hizo que todo el mundo siguiera la mar de animado. No faltó uno de mis temas favoritos Elle Me Dit, en su versión original en francés y no la del disco en inglés (Emily), su exitoso Grace Kelly y terminando con el hitazo que es Love Today que se extendió de una forma magistral incluyendo cachondeo con Max, uno de los miembros del grupo en directo, que no dejaba de cantar la canción aún habiendo acabado.


A los fans Mika los tenía entregados desde el minuto cero pero a aquellos que no habíamos visto en directo y nos decían por todos lados "Por Mika merece la pena esperar, es la felicidad hecha concierto", ya nos tenía entregados a la causa sin problema alguno. Un concierto que no pierde ritmo (quizás faltaron Happy Ending o el bonus track del primer disco, Ring Ring, pero esto es sólo por poner algún pero) y que además tiene una buena apoteosis final con la mayor parte de temas acelerados y bailables entre pelotas gigantes, que por un momento aquello parecía un videojuego, lucecitas rojas y mucho baile. 

Mika junto con su banda, muy completa y con un sonido perfecto, se despidieron para regresar rapidamente a cantar un tema más. El elegido fue We are golden al que le acompañaría una explosión de confeti que nos inundó, literalmente. Creo que una muerte entre confeti sería, lo que se llama, una muerte dulce,

Mika cerraba así el concierto, un concierto lleno de felicidad, buen rollo, como los de Delafé y las Flores Azules, mientras algunos jugaban a lanzar el confeti que estaba por el suelo creando pequeños geysers.

Ya lo echo de menos. Voy a lanzar confeti por casa. Mika rules!


Gracias a Juan Hernando por llevarme a este concierto

1 comentario:

  1. JAjajaja yo también pensé que moriríamos entre confeti. Ring Ring hubiera sido un puntazo, la verdad, pero consiguió un setlist equilibrado con sus 3 discos y hasta temas sueltos como Elle Me Dit y la nueva Live Your Life (que en Barcelona fue de las que tuvo mejor acogida, está pegando fuerte). Molan estos conciertos gratis, ¡que cunda el ejemplo!

    ResponderEliminar