This is the end of the world

Siempre hay particulares directores que cada estreno se convierte en un acontecimiento, lleno de seguidores y de detractores a partes iguales, así que ahi estamos con Lars Von Trier, que se ha hecho su nueva película Anticristo, no hay que confundirse que en realidad no habla (directamente) de religión, aunque si que hay algunas pinceladas lejanas al tema, pero lo nuevo de Lars Von Trier es una nueva ida de pinza aún mayor que anteriores producciones: se puede resumir en que el mismo director dice que hace la película para él mismo, y no le importa el público... y que se lo tiene muy creido, eso también, que se piensa que puede hacer lo que quiera, darle un poco de promoción y que la gente vayamos a verla, pero lo peor es que algunos acabamos yendo, ya sea por el motivo de ver la peli o por cualquier otro motivo.

He de reconocer que yo me he reido y mucho, pero también por la actitud que llevábamos, desde ver en escenas dramáticas referencias a el troncomovil, a la posibilidad de una rave en el bosque donde se desarrolla la escena o una posible aparición de los velociraptors, en plan Parque Jurásico, o como es posible que haya tanta cantidad de bellotas en un árbol y sólo caigan de noche en masa... un desvaríe casi comparable a la película, con la salvedad de el prólogo y el epílogo, que tienen algo de encanto, la combinación música con escenas en blanco y negro. Willem Dafoe y Charlotte Gainsbourg han tenido que defender bien sus papeles, aunque en ocasiones eran suplidos para escenas explícitas de sexo (quien dice escenas dice dos minutos en toda la película) por dobles de cuerpo que eran actores porno, a lo que Willem dijo que creía que él tenía un rabo más bonito que el doble que le pusieron.

Al parecer la idea de la película según confiesa fue en plena depresión se dedicó a escribir esta historia y a rodarla sin tampoco demasiadas ganas, es más al parecer era todo un misterio antes de Cannes, donde fue presentada, que era lo que se iba a encontrar uno tras aquella cinta, finalmente le han caido palos de todos lados, hasta de su psiquiatra que considera que no es recomendable para aquellos que vean previsible acudir a uno en breve. Vamos, que se hizo una terapia completamente, y es probable que haya creado algún trauma a algún espectador, que ya el cine está al menos en algunos a 7,80€, seguro que antes de que acabe el año hemos llegado a la frontera de los ocho euros.

Y entre unas y otras Where is my mind? un clasicazo de los Pixies que resonó en esa solitaria borrachera a la par que improvisada, y que he podido escuchar casi cincuenta veces, lo cual me hizo darme cuenta que formaba parte de la grandiosa película de El Club de la Lucha en esa escena de destrucción masiva, pero de una gran belleza visual agrandada con este tema de fondo. Hay múltiples versiones entre ella, una de los Placebo, aunque más delito quizás es que hiciera una James Blunt.

¿Cuando rodamos nuestra gran superproducción?, porque si, tomemonos la confianza, Lars ha hecho algo así, nosotros podemos alcanzar el grado de obra maestra, la próxima parada cinéfila será seguramente Mapa de los sonidos de Tokio, de Isabel Coixet que esperemos supere a Elegy, película que realmente había borrado de la mente pensando que "La Vida secreta de las palabras" era su anterior trabajo, ya que es mejor borrar ciertas películas y no gastar memoria.

Y si quereís bailar a ritmos petardos, coreografías y pop en estado puro Chicos Malos Jukebox estarán en el Eclecticlub (sala Clamores, calle Alburquerque, nº 14) este viernes 28 pinchando sus ritmos para ir cerrando el mes de agosto, enfrentándose a los DJs Trigger Selector & Tula Pones, ¿Quien ganará?, pues para eso lo mejor es darse una vuelta por allí y descubrir cuales serán las armas que sacarán cada uno en esta batalla fin de verano.



¡Rodando!