This is my island, my fantasy

A veces uno piensa que está enterado de las cosas, pero se da cuenta que no, hasta hace dos días no tenía ni idea de la existencia de lo que vimos anoche en primicia: los quince primeros minutos de Avatar, la nueva película de James Cameron que lleva años y años preparando, ya que su último largometraje para cine fue aquel en el que todos sabemos que Rose dejó que Jack se hundiera en las aguas frías tras el hundimiento del Titanic porque entraba en la tabla, pero ella era una egoista...


Así que tras una sesión casera de Lindsay Lohan con sus Chicas Malas, acabamos en el cine junto con la sección friki que estaba deseosa ver este adelanto de 15 minutos de la nueva super producción de Cameron que es en 3D y que tendrá la duración de tres horas, cuando su estreno será en los fríos días del invierno, exactamente el 18 de diciembre. Se apagan las luces y James ameron aparece ya en 3D en escena para presentarnos diciendo que seguramente lo que esperábamos era un trailer, pero que decidió que para ver como va a ser que mejor una muestra de cuatro o cinco escenas de la película donde no se desvela nada de la trama, pero si para ver lo que nos va a esperar... y promete, un mundo fantástico, que puede potenciar el juego con las tres dimensiones que se notan pero que no juegan a golpes de efectos sencillos hacía el espectador, sino la tendencia a dar una profundidad y acercamiento aún más de la historia. El protagonista es otro aliciente el TREMENDISIMO Sam Worthington, visto en la última de Terminator: Terminator Salvation, a lo que debemos acompañar Sigourney Weaver que al menos ya es sello de calidad de buena actuación y que regresa a mundos fantásticos, aunque nada que ver con sus experiencias con los Aliens. Lo sorprendente es que la sala no estaba llena completamente, frikis del mundo estamos perdiendo puntos y poder.

Lo mejor será esperar pero creo que cuando salimos del cine todos dijimos que estábamos con ganas de verla, los meses se harán largos. A la salida hago recomendación de un lugar situado en la calle Fuencarral 203 llamado Jazmin, asiático donde todo lo que tienen tiene tan buena pinta y la amabilidad es marca de la casa, buen precio, servicio rápido, cómodo, así da gusto ir.

El único lugar barato céntrico está en la calle Libertad 17, es el Outlet Bar donde las copas, minis y demás, aunque eso si el ambiente parece de Londres con tanto humo y ya hay que hacer hasta cola si se llena como si fuera el bar de moda, aunque la música está de fondo, pero para primera hora y darse a la bebida de manera rápida, como hicimos no está nada mal.

El final fue en el ya clásico Ocho y Medio donde había sesión de los Bombastich! vs Tugunska, creo que claramente se podían separar los temas de unos y otros, unos eran más poperos de pro y el otro pues más a su royo, así pudieron sonar en la misma sesión el One more time de Daft Punk, el Hey boy, Hey girl de The Chemical Brothers, con Esta noche cantan para mi de La Casa Azul, La más fane remezclada de L-Kan, el Boogie Movie de McNamara y la gran sorpresa es que me pusieran la canción que me encanta de la semana que es el Into the clouds. Apuesto a que ha ganado la partida tras ver su colección de discos en el MySpace los Bombastich!, además por goleada.

Oye que fue una noche completa sin demasiada bebida, buena compañia y muchos planes interesantes, y los que se preveen sin saberlo tras una llamada en los próximos días. Que yo quiero bailar toda la noche, que dirían las dos siliconadas aquellas, aunque si viene Sam pues bailar y que se venga a mi casa. Anda que no.

This is my island (island), my fantasy (my fantasy)...