19 de mayo de 2010

Un buen día

"Me he despertado casi a las diez
y me he quedado en la cama
más de tres cuartos de hora,
y ha merecido la pena.

Ha entrado el sol por la ventana,
y han brillado en el aire
algunas motas de polvo.
He salido a la ventana
y hacía una estupenda mañana"


La tarde comenzó en la terraza con unas cervecitas, una ensalada de tomate con queso, unas patatas fritas, unas aceitunas, unos mejillones, un queso... no, no éramos masa de gente pero para dos personas no está nada mal, aunque el buen tiempo acompañaba perfectamente a estas en esa situación.


Marchando una fidegua, o fideguay como he renombrado yo, que estaba la mar de buena. Llena de todo tipo de bichos que se suelen echar: calamares, langostinos, etc. El sol estaba pegando perfectamente, así que le seguimos acompañando con bebida. Ser un buen anfitrión no es tan facil, pero en este caso me quito el sombrero.



Después de la cerveza directamente hemos pasado al vino. Es lo que tiene que al final nos hemos puesto a lo tonto bien finos, pero se acabó tan pronto las dos botellas de vino, incluida la que tiene mensaje en la etiqueta de ahí arriba, como si fuera el "Un, Dos, Tres":

"Cada vez que me sorprendo poniendo una boca triste, cada vez que en mi alma hay un noviembre húmedo y lluvioso. Entonces entiendo que es más que hora de hacerme a la mar tan pronto como pueda"
Herman Melville


Aunque a algunos no les guste "Love Actually", en la imagen de arriba se puede ver que el amor está en todas partes.


Tras un copazo de helado con vodka y viniendo que las provisiones de alcohol se estaban agotando peligrosamente, nos fuimos con nuestras pintas playeras al supermercado: si, queríamos ser el centro de atención vestidos como si estuviéramos en pleno verano. Mis pintas playeras eran además prestadas. La pena es que no quedara sorbete de limón. Sniff.



Confesiones tirados en los sofás. En esas horas hay gente que estaba viendo "Sálvame", pero el mejor "Sálvame" es el improvisado entre dos o tres personas de charla, y sin los horribles gritos de Belen Esteban y similares mamarrachos. De todo y para todos, repartimos entre cosas buenas y malas. Esto sólo se puede hacer en buena compañia y lo era.


A medida que pasaba la tarde hubo que combinar el alcohol con el protector solar, las rojeces estaban saliendo como setas pero... ¡Se estaba tan agustito tirados en la terraza!, sólo faltaba una piscina para rematar la jugada. Tiempo al tiempo.


La música ha acompañado todo el día: desde The Pipettes, We are the Pipettes -que había llegado esa misma mañana a mi buzón-, hasta Lady Gaga con The Fame Monster, pasando por el segundo disco de los Klaus&Kinski: Tierra, Trágalos. Quien dijo que no tenemos variedad musical.








Hasta el último momento dándolo todo del todo, quien hubiera pensado que un martes primaveraniego hubiera sido tan entretenido.

¿Cuando me has dicho que es la próxima?. Mil gracias por un día así.

4 comentarios:

  1. Yo hubiera matado por un día así... de hecho mato por un día así....

    ResponderEliminar
  2. Woow....Parece que es un anuncio de la vida perfecta y todo!!!
    I´m back en el mundo bloguero!!!

    ResponderEliminar
  3. Yo tambien quiero matar por un día así! Tengo solo el sol y la terraza (por ahora!) A disfrutarlo como te he dicho muchas veces, doblemente porque una te la quedas tú y otra para contarnosla a nosotros :D

    ResponderEliminar
  4. ¡Menudas vistas!
    ¿Son de Madrid? :P

    Un besote Fer!

    ResponderEliminar