Ven al parque, ven a vivir... con los zombies

Hacía mucho que no iba al Parque de Atracciones de Madrid, pero hace unos días nos reunimos un grupo bastante divertido friki para acudir. El motivo era que por primera vez este parque celebraba, con todos los honores, la festividad de Halloween durante todo un mes.

El parque se revestía con Animatronics gigantes repartidos por las instalaciones, animación de calle y un hilo musical que se había creado para todos estos días -con una grata sorpresa como usar el tema Halloween de Aqua entre otras canciones como bandas sonoras diversas, como Matrix-, la creación de dos pasajes del terror (El Mausoleo y Juegos Mortales).

Pero sin duda el "rey de la fiesta" es un clásico del parque de atracciones El Viejo Caserón (Si pinchais en el enlace descubrireis que Nosolomusica sobrevivió a Kate Rush). Este pasaje del terror se inauguró en 1989 bajo el nombre de Pasaje del Terror, aunque después en 1998 fue re-inaugurado bajo el nombre de El Viejo Caserón con cambios notables en su decoración. Han visitado sus estancias gente como Tim Burtón (Director de Batman, Big Fish, Eduardo Manostijeras) o Robert Englund (Popular por ser Freddy Krüeguer en la saga de Pesadilla en Elm Street)

Con el paso de los años, lleva más de 22 en activo, se ha convertido en un gran clásico, lleno de leyendas urbanas que circulan por doquier. El caserón se encuentra situado en la parte superior del parque, donde nada más llegar se respira la intranquilidad a sus alrededores... allí fue donde nos plantamos al sol del veratoño a esperar: Odio esperar en este tipo de lugares. Empiezo a dar saltitos, las piernas me empiezana a temblar y a esa sensación de inquietud del miedo controlado. Cuando cierran una verja casi delante de tus narices, teniendo la sensación de "ays que ya entro...".

En esta ocasión además, por rematar la jugada, nos debieron ver cara de "Estos van a gritar" con lo que un equipo de pululaba por allí de Cuatro y decidió meterse con nosotros. Estupendo. Ahora encima vamos a salir en plan nenazas gritando cual loca... No, finalmente nuestros planos fueron cortados del reportaje. Casi que mejor.

Tres llamadas a la puerta y entramos. La puerta se abre sola, una sala con una larga escalera que no sabemos donde llega, una especie de anfitrión con voz de ultratumba que acaba bajando desde las alturas de la escalinata para introducirnos en este pequeño infierno de diez minutos.

Misterios en los suelos de las colas

Desde ese momento la tensión se masca en el ambiente entre pasillos con payasos -que nunca se a quien le han gustado, si son lo más tétrico quehay-, cementerios de donde no sabes de que nicho te va a aparecer un zombie con ganas de comerte el cerebro. Una especie de sotano industrial acoge a mirones por las alturas y la posibilidad de salir de allí si estamos realmente pasados un mal rato. Nadie se va, entonces llega Freddy Krüeguer que sale hasta tres veces de diferentes lugares -esto se le llame explotación en toda regla-. Drácula es un clásico, es más el actor Unos pasillos de manicomio interminables, horror por doquier, con un featuring de trozos de carne colgados en plan almacen, en ese instante mis gritos fueron "No, no, esto ya no" ¿Alguien me escribe una carta de recomendación Scream 5?

Estupendo para salir corriendo del lugar y con una preciosa afonia. Si, eso sucedió.

A la caida del sol, con la llegada del noche junto al caserón podemos observar un cartel que pone Salida de Zombies ¿Perdona? ¿Hola? Pues hombre es raro, se ve un color rojizo tras la puerta, y humo, se abre la puerta... Uys, ¡Me cague en la leche! ¡Que están saliendo monstruos! Bueno parece que van desfilando, como en Disneylandia pero sin Mickey... hasta que... ¡Se desata el pánico! Cuando empiezan a perseguir a esas personas perfectas: Chicas con cuenta de Tuenti y blackberry que corren en grupo perfectamente organizado para matarse todas juntas con un tropezón tonto.

Yuju, son unos frikis

Aparte claro puedes divertirte montando en atracciones de altura: La Lanzadera, una combinación de ver vistas de la ciudad y de caer a toda leche, Vértigo, donde el ataque de risa en plan "Uys que esto va a salir volando en una curvaJAJAJAAJAJ", Abismo donde estás segundos boca abajo literalmente a una lentitud de pasar miedo, La Tarántula, donde no sabes para donde va a girar el vehículo o el Tornado, un clasicazo perfecto.

Ahora que también están las atracciones chorras divertidas Desperado: una de estas que te subes en una especie de caballito con una pantalla gigante delante, una pistola laser y a disfrutar como un enano, sabiendo si tienes buena o mala punteria. Disfrutando cual niño pequeño.

Ya con el fresco de la noche es hora de regresar. El mayor terror es pasear por los aledaños del parque de atracciones solitario, en oscuridad y en silencio... pero eso, es otra historia.