Hace unos días no sabía como definir a Guille Milkyway, cuyo nombre real, por cierto, es Guillem Vilella. Me salió la expresión de campanilla mágica del pop. Es así. Guille tiene una especie de varita mágica que convierte en éxito de todo lo que toca, ya sea un tema de La Casa Azul, de su proyecto alternativo Milkyway, remixes, versiones, canciones para publicidad, bandas sonoras de series infantiles, canciones para aniversarios de canales televisivos... En todos ellos dejando su propio sello. Ahora bien, hay proyectos que dan un poco de miedo, como es el caso que nos ocupa.
Así tenemos entre nuestras manos, o en streaming, el disco En Libertad by La Casa Azul (Universal Music, 2013), una revisión de la producción de algunos de los temas de Nino Bravo. Este planteamiento de base es muy peligroso ¿Quién se va a atrever a hacer nuevas versiones de, la que es, una de las voces del pop español? Pues Guille lo hace, de forma natural. Con su estilo pero sin perder, en la mayoría de los casos, la esencia de las canciones original.
El disco gustará a los seguidores de Nino Bravo porque van a seguir reconociéndole en él. Una de las quejas que se leen es que la voz de Nino Bravo en muchas ocasiones parece que no destaca sobre la música. El problema viene de las grabaciones originales, ya que en la mayoría no existía la posibilidad de separar la pista de voz del resto, provocando un entramado complicado para poder hacerlo. Además debemos darnos cuenta que el disco es By La Casa Azul, no bajo el nombre de Guille Milkyway, por lo que las canciones tienen un sonido muy cercano a las últimas producciones del "grupo".
12 son las canciones elegidas entre las que vemos ausencias de grandes clásicos como Noelía, Libre o Un beso y una flor, en cambio caen algunas canciones más desconocidas, e incluso alguna cara B, como la que da nombre al disco. La elección ha sido libre por Guille y ha querido dar un equilibrio entre temas populares y alguno más desconocido donde poder jugar más con el sonido. Así podemos disfrutar de Te quiero, te quiero, Esa será mi casa o Cartas Amarillas con un nuevo sonido pero respetando lo que podría haber sido el sonido de Nino Bravo en el siglo XXI, que es la idea original del proyecto.
Guille se ha autoconcedido un par de licencias musicales en dos temas: por un lado la forma bailable setentera de Arena de Otoño que lo hace de una manera casi tímida, subiendo poco a poco y de una forma elegante. Por otro tenemos En Libertad, que se encarga de cerrar el disco, comienza también de una forma tímida hasta que al final no se corta, se desata, le mete unos sintes a toda velocidad y se encarga de hacer un rollo hiperbailable de discoteca, al más puro estilo La Casa Azul.
Realmente tras ver lo bien que ha actualizado el sonido de Nino Bravo por medio de la nueva producción en este En Libertad by La Casa Azul y parece que no hay puertas cerradas a una segunda entrega con otros tantos temas... ¿Cuándo va a hacer lo mismo con Mocedades? Quiero, quiero, quiero. Creo que podría ser bastante divertido y dar una actualización musical a grandes clásicos del pop español. Lo digo completamente en serio.
Este disco es perfecto porque produce una fusión generacional, servirá para que los más jóvenes, y no tanto conozcan algo más de Nino Bravo, y los más mayores vean que grupos como La Casa Azul también pueden interesarles, al final el pop no es tan diferente entre las épocas.
Le gustará a tu madre y te gustará a ti, lease un estupendo regalo navideño. Recordad que es muy complicado unir generaciones, y cosas así sólo recuerdo verlas en plan madres e hijos yendo juntos al musical de Mamma Mia!.
Ojito... Ummm ¿y un ABBA visto por Guille Milkyway? Si por algo le llamé, casi inconscientemente, la Campanilla mágica del pop. Todo comienza como un viaje en la montaña rusa, tienes mucho miedo hasta que estás subido y ver que realmente disfrutas ¡Qué cruce la pasarela!
¡Ah! y la idea es que el nuevo disco de La Casa Azul esté tras el verano del 2014... ¡Más ganas!
Bonus Track: Entrevista con Guille Milkyway y gente relacionada con Nino Bravo a tenor del lanzamiento de este disco.
El disco gustará a los seguidores de Nino Bravo porque van a seguir reconociéndole en él. Una de las quejas que se leen es que la voz de Nino Bravo en muchas ocasiones parece que no destaca sobre la música. El problema viene de las grabaciones originales, ya que en la mayoría no existía la posibilidad de separar la pista de voz del resto, provocando un entramado complicado para poder hacerlo. Además debemos darnos cuenta que el disco es By La Casa Azul, no bajo el nombre de Guille Milkyway, por lo que las canciones tienen un sonido muy cercano a las últimas producciones del "grupo".
12 son las canciones elegidas entre las que vemos ausencias de grandes clásicos como Noelía, Libre o Un beso y una flor, en cambio caen algunas canciones más desconocidas, e incluso alguna cara B, como la que da nombre al disco. La elección ha sido libre por Guille y ha querido dar un equilibrio entre temas populares y alguno más desconocido donde poder jugar más con el sonido. Así podemos disfrutar de Te quiero, te quiero, Esa será mi casa o Cartas Amarillas con un nuevo sonido pero respetando lo que podría haber sido el sonido de Nino Bravo en el siglo XXI, que es la idea original del proyecto.
Guille se ha autoconcedido un par de licencias musicales en dos temas: por un lado la forma bailable setentera de Arena de Otoño que lo hace de una manera casi tímida, subiendo poco a poco y de una forma elegante. Por otro tenemos En Libertad, que se encarga de cerrar el disco, comienza también de una forma tímida hasta que al final no se corta, se desata, le mete unos sintes a toda velocidad y se encarga de hacer un rollo hiperbailable de discoteca, al más puro estilo La Casa Azul.
Realmente tras ver lo bien que ha actualizado el sonido de Nino Bravo por medio de la nueva producción en este En Libertad by La Casa Azul y parece que no hay puertas cerradas a una segunda entrega con otros tantos temas... ¿Cuándo va a hacer lo mismo con Mocedades? Quiero, quiero, quiero. Creo que podría ser bastante divertido y dar una actualización musical a grandes clásicos del pop español. Lo digo completamente en serio.
Este disco es perfecto porque produce una fusión generacional, servirá para que los más jóvenes, y no tanto conozcan algo más de Nino Bravo, y los más mayores vean que grupos como La Casa Azul también pueden interesarles, al final el pop no es tan diferente entre las épocas.
Le gustará a tu madre y te gustará a ti, lease un estupendo regalo navideño. Recordad que es muy complicado unir generaciones, y cosas así sólo recuerdo verlas en plan madres e hijos yendo juntos al musical de Mamma Mia!.
Ojito... Ummm ¿y un ABBA visto por Guille Milkyway? Si por algo le llamé, casi inconscientemente, la Campanilla mágica del pop. Todo comienza como un viaje en la montaña rusa, tienes mucho miedo hasta que estás subido y ver que realmente disfrutas ¡Qué cruce la pasarela!
¡Ah! y la idea es que el nuevo disco de La Casa Azul esté tras el verano del 2014... ¡Más ganas!
Bonus Track: Entrevista con Guille Milkyway y gente relacionada con Nino Bravo a tenor del lanzamiento de este disco.
No podria estar mas de acuerdo. El resultado es estupendo. Sorprenden las letras un punto ñoñas setenteras con los nuevos arreglos pero las melodias son deliciosas y la voz de Nino potente.
ResponderEliminarMocedades by La Casa Azul? perverso... Pero que sugerente.
¡Hola Gaspar! Siempre que de pequeño en mi casa sonaba Mocedades era un poco en plan "la música que les gusta a mis padres". Ahora ya de mayor me he dado cuenta que es música pop en estado puro con sus buenas letras, dentro de su estilo... Creo que darles una revisión de sonido sería algo genial. Gracias por el comentario ;)! ¡Saludos!
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