El pasado viernes la sala El Perro de la parte de atrás del coche, nombre original donde los haya, actuaba Bravo Fisher!, otro con nombre original, dando el que sería el último concierto antes de encerrarse a la composición del nuevo disco. Supongo que siendo profesor aprovechará el verano, con más tiempo libre, para poder implicarse completamente en su composición.
El concierto era un plantel doble: antes como teloneros estaban el grupo Perro. Realmente a una amiga y a mi el cantante nos ponía muy perros (tomad chiste facil) y musicalmente vimos como el grupo pasaba por un montón de fases en los más de 40 minutos que tuvieron de actuación. Si pincháis en su nombre os lleva al bandcamp donde podréis descargar, completamente y legalmente, gratis sus temas. Creo que si hubiéramos dado una escucha a sus temas antes del concierto nos hubieran gustado más.
Todo comenzó con un gran retraso, tanto como una hora, debido a problemas técnicos. Así que Bravo Fisher!, nombre bajo el que se oculta Guillermo Galguera, hasta alrededor de las doce no apareció al escenario con su camisa cuasi hawaiina, Dani (Niño Burbuja) que es ya un compañero fiel en los últimos meses junto a él en el escenario y en esta ocasión, casi como sorpresa, la aparición de Celia (Hard Candy DJ) como bajista para esta actuación.
A más actuaciones de Bravo Fisher! mejor, la cosa va mejorando, cada vez todo es más bailable y suena más compacto. Si algo le identifica es su ukelele y juego de piernas. El concierto era perfecto para una calurosa noche de verano con sus letras y melodías aceleradas. Escuchamos desde temas clásicos de su repertorio como Buildings of Decay, que ya estaban en aquel primer disco autoeditado (Overnighters) pasando por A Little Visit, otros que lanzó con su segundo disco (We are Overnighters (43 music, 2011) con nuevos temas y nuevas versiones del anterior), como el hit Face it, así como alguno inédito que lleva tiempo tocando (Waiting for the Summer). No falló Drinking Mojitos que me recuerda tanto a Barcelona, y que es otra de mis canciones favoritas... aunque sospecho que tengo unas cuantas con ese estatus. Su primer disco,fue uno de los mejores del año pasado para un servidor.
Calor, cervezas, buena música... acompañado de una escapada antes de que acabara el concierto porque con el retraso se nos juntó con una obra de Microteatro, una pena. Antes de terminar diré una cosa, por si lo lee Bravo Fisher!: ¡Haz más conciertos en verano y sálvanos de las desgracias que tenemos a ritmo de baile! Seremos más felices.
No hay comentarios:
Publicar un comentario