Alain Saralegui es el invitado del día de hoy. Le conocí hace mucho, muchos, MUCHOS años como amante de la música pop y compartiendo conciertos. De repente, como el que no quiere la cosa, abandonó España y acabó en los Estados Unidos. Allí decidió, por fin, ponerse a escribir. Así a día de hoy tenemos su primera novela publicada, El fin del mundo a cucharadas (Autoeditado, 2020). Una historia sobre el fin del mundo vista por diversos personajes, por qué ¿Quién no ha pensado alguna vez en comprarse un búnker o presentarse a un concurso de imitadoras de Raffaella Carrá cuando está a punto de estrellarse un asteroide?
Alain, escritor y amante del pop, ¿Dónde te encuentras ahora mismo?
Pues me gustaría decir que en el templo del pop, que es lo que suena en el Spotify ahora mismo, pero yo creo que más bien estoy en una especie de limbo. No sé si del pop o de qué, pero sí, en un limbo.
Y, si no has cambiado de sitio, en los Estados Unidos. Veníamos a hablar de tu libro, El fin del mundo a cucharadas (Autoeditado, 2020), pero ahora mismo está habiendo un culebrón en España, ¿Te has enterado de lo que está pasando en Murcia? (Esta entrevista se hizo el día que saltó todo el salseo político murciano) Y no, no es una nueva gala de Murcia, que hermosa eres
Jaja, sí, sí, vivo en Michigan pero no pierdo ripio de lo que pasa en Murcia, faltaría más. Acabo de ver una promo que ha hecho la Sexta comparando a Ciudadanos con el Titanic y me ha parecido maravilloso. No sé si te referías al tema político, que en Murcia pasan muchas cosas.
Sí, era a nivel político. Ni una telefilme de Antena 3 por la tarde. Puede ser un buen comienzo para una novela. Quizás para la segunda... Aunque tu puntería con ésta ha sido total: Llega la pandemia y tú hablas del fin del mundo, ¿Cuánto tiempo has estado preparando el libro?
Año y medio, casi dos. Empecé cuando el mundo era normal y acabé cuando parecía que el título del libro se iba a cumplir en cualquier momento. Me sentí un poco como Kylie cuando se murió Lady Di y tuvo que cambiar el título de su disco y posponerlo, pobrecilla. Pero vamos, que no me arrepiento de nada, si Kylie puede sacar un disco para bailar cuando no se puede ir a bailar, todo es posible. Como ves me he remitido a Kylie dos veces en la misma pregunta. ¡Espero que no te importe!
Kylie y su princesa imposible |
No sabía que había cambiado el nombre de un disco por la muerte de Lady Di. No me importa, ¡Me interesa!. Con la cantidad de tramas que hay en El fin del mundo a cucharadas pensé que te habría tomado mucho más tiempo.
Sí, cuando Kylie iba a publicar Impossible Princess le tuvo que cambiar el título porque justo va y se muere Lady Di... lo cual me recuerda cuando tenía que dar un concierto en Madrid y no pudo porque le tocó una huelga general. Kylie no tiene suerte con los tiempos. En cuanto al libro, pues ha coincidido con una etapa de mi vida en el que no tengo un trabajo estable y sí mucho tiempo. Supongo que si siguiera trabajando ocho horas al día hubiera tardado siglos en acabar. O puede que ni lo hubiera empezado. Vivir en un país donde no te entienden cuando hablas ayuda a abstraerse y a concentrase en hacer cosas.
Lo importante es que lo hiciste. Pero como toda obra hay un momento en el que dices "Esto es lo que quiero contar", ¿Cuál fue el "brote" por el que empezaste a escribir? ¿Un trauma con el I don't want to miss a thing de Aerosmith? Sigo pensando en Kylie, pobrecilla. A veces no ha tenido suerte.
Jaja, en todo caso con el Miss a Thing de Kylie, que a mí Aerosmith me dan igual. Prometo no hablar más de Kylie. Pues cuando estaba en ese limbo vital e idiomático que te he comentado al principio sentía que tenía que hacer algo de provecho con todo el tiempo que tenía libre, que no me he visto en otra. Y como a mí me engañaron diciendo que si estudiaba periodismo iba a hartarme a escribir y luego no fue así, pues decidí probar por libre y escribiendo ficción, que aunque en Murcia no lo parezca, la ficción a veces es más interesante. Y escribí un relato breve que se llamaba Diva doméstica, sobre una señora obsesionada con Eurovisión y desgraciada en el amor. Y me dije: voy a escribir más relatos. Y así hasta que me ví con un tocho de 447 páginas en medio de una pandemia mundial. Lo normal.
Tenía que haber parado 200 páginas antes o así, pero ya sabes que cuando haces pop no hay stop.
Literal 🙂
Claro que sí. Lo lógico, porque al final parece que el fin del mundo es una estupenda excusa para mostrarnos unos personajes bastante peculiares y a los que les pasan cosas surrealistas. ¿Hay alguno de ellos basados en personas de carne y hueso? (Como dirían las Tess)
Más que personajes, hay lugares y escenarios reales, de aquí de Michigan. Como la guardería de maridos, que está al lado de casa y desde fuera no se ve lo que hay dentro de todo lo que fuman. Puede que la protagonista de Turno de noche sea un poco yo de cuando trabajaba en el turno de noche de un hotel en Madrid. Bueno, y Raffaella Carrà y demás artistas invitadas son las auténticas, claro. Pero la mayoría son inventados.
Bueno, Maritere está inspirada en una youtuber de 70 años que me enseñó a hacer unas lentejas de rechupete en su canal. Y Porn Unicorn puede ser cualquiera, vete tú a saber.
La juventut, que diría Mónica Naranjo, de Raffaella Carra |
No hubiera pensado que lo de la guardería estuviera basado en un lugar real. Hablas de Raffaella Carrà , pero es que el libro está lleno de referencias pop. Unas más señaladas, como las eurovisivas, y otras más escondidas, ¿El amor a la música pop está en tus venas?
¡Por supuesto! Supongo que es inevitable que se noten las cosas que te gustan y las que no hasta cuando escribes ficción. Casi todas las referencias son un poco retro, porque hablo más de Betty Missiego o de Paloma San Basilio que de Blas Cantó, y lo mismo con las películas que salen. Si estoy chapado a la antigua, pues que se note, no me preocupa.
Además, el pop es atemporal. He sido muy feliz en los conciertos de La Casa Azul o de Cola Jet Set.
"Björk es atemporal" que decía Natalia en Miss Tacuarembó. Hay una lista en Spotify con canciones con el nombre del libro que bien pueden definir lo que uno se va a encontrar: Desde El Fin del Mundo de La La Love You, Ganas de Matar de La Prohibida o Colisión Inminente de La Casa Azul. Mi pregunta es: Si a alguien se le ocurre adaptar tu libro al cine ¿Qué director te gustaría y quién querrías que hiciera la banda sonora?
Uy, qué maravilla Miss Tacuarembó, la ví en un cine de Madrid que luego cerraron porque la pantalla estaba como torcida y no había nadie, era como la Haunted Mansion de Disneyworld pero en cine antiguo. Pues el director no sabría decirte, supongo que alguien que tenga una estética muy pop (hace poco ví Explota Explota y visualmente me chifló). Y la banda sonora me encantaría que fuera un mix entre Miranda! y Christina Rosenvinge, por ejemplo
Ahí viviendo al límite. Mejor no hablemos del melón de Explota, Explota... En esa lista se incluye un tema llamado Un día más en la vida de Sidonie, y es que los personajes de El fin del mundo a cucharadas parecen aceptar ese final, como si fuera algo más en su vida, ¿Crees que hay similitudes a como estamos viviendo la pandemia mundial?
Puede que lo que al principie sorprenda y te pille con el pie cambiado según pasa el tiempo lo interiorizamos tanto que hasta lo acabamos de aceptar. Ya sea por cansancio, por aburrimiento o por impotencia, no sé. Aunque al ser una novela de humor, me cuidé de que el fin del mundo fuera el trasfondo, nunca el protagonista de ninguna de las historias. Y que los personajes tuvieran otras cosas de las que preocuparse. Me parecía divertido que se dedicasen a mirarse el ombligo incluso con un asteroide de camino.
Así somos. No me digas que no hay nada más triste que lo tuyo, como dirían los Hidrogennesse.
¿Por qué elegiste a Roberto Gutiérrez para hacer la portada? ¿O Roberto te eligió a ti? ¿Fue una simbiosis?
Pues a Roberto lo conocí en un curso de dibujos animados que hicimos en Bilbao. Contra todo pronóstico, éramos los únicos en toda la clase a quienes les gustaba Disney, y claro, hubo conexión inmediata. Lo que no sospechábamos es que haríamos algo juntos 20 años después de aquello, él en Bilbao y yo en Michigan. Pero le pasé Diva doméstica para que me diera su opinión y me sorprendió con la portada... cuando todavía no había escrito el libro. La chica de la portada es la Diva doméstica de cuando solo era un relato de diez páginas 🙂
Igual que ahora nos compramos una casa, puede que en el futuro nos compremos un bunker. Ya me has dicho que comenzó todo con un relato, ¿Se te han quedado historias fuera? ¿Te gustaría hacer un spin-off de alguno de los personajes?
La verdad es que me encantaría. Ya tengo algunas ideas pata contar lo que pasó antes del fin del mundo y otras para contar lo que pasó después del fin del mundo. Pero primero quiero saber si este tipo de humor un poco retorcido gusta, que parece que un libro de humor se escribe solo y la verdad es que no. Son muchas horas llorando delante del ordenador para hacer reír a los demás. Me ha quedado un poco dramático esto, pero así es.
Solo espero que la realidad no me vuelva a hacer spoiler.
Y tan dramático, con estas últimas frases te rellenan una tarde Sálvame. Sobre dramas, o no dramas, ¿Con qué personaje te identificarías del libro? ¿Cómo crees que reaccionarías a un fin del mundo real? Porque esto de la pandemia ha sido como muy light.
Es que un asteroide del tamaño de Albacete capital a priori impresiona más que un virus que ni se ve, pero en amenazas contra la Humanidad el tamaño no importa, supongo. Esto es como cual de las protas de Sexo en Nueva York o cual de las chicas de oro eres, una cosa es quién crees que eres y otra quién te gustaría ser, que rara vez coinciden. Diría que me gustaría parecerme a Mari Trini, por lo echada palante que es, pero que en realidad soy Doña Mariví, analógico e inseguro.
Supongo que si me entero de que voy a morir aplastado por un asteroide me lo tomaría con resignación. E iría a Disneyworld a gastar todo el dinero.
Aunque ahora podríamos llamarte Mary Triny o algo así, por eso de vivir en Estados Unidos. ¿Cómo se ve desde dentro algo tan loco como lo de Trump? Aunque claro aquí tenemos a Ayuso, que pa' el caso es lo mismo.
Jaja, tú lo has dicho. Además me he tragado los cuatro años de Trump, vine justo cuando llegó y se acaba de ir. Pues lo sobrellevas con humor, qué remedio. A veces no sabías si estabas viendo al auténtico o a los de Saturday Night Life imitándole. Era un filón.
A veces no hay mejor terapia que el humor. Qué remedio.
Creo que es la única que queda, yo al menos me he descojonado leyendo el libro y las dramatizaciones. Dramatizaciones que pueden pasar por reales. Y, es verdad, ¡Ahora tienes Disneyworld más cerca! te odio.
Te diré que fue el último sitio al que fui antes de que cancelaran el mundo. Dos días antes de que se fuera todo al carajo me alojaba en la habitación de la Sirenita, duchándome rodeado de burbujas y peces y hacía cola para el Rise of the Resistence. ¡Lo que cambian las cosas de un día para otro!
Como dicen a los de Españoles por el mundo, ¿Volverás algún día a España?
¡Claro que volveré! Ahora no es el momento porque no hay trabajo y no puedo vivir de las ventas del libro, ¡ojalá!.
Por cierto, lo de Rise of the Resistence: Dime que es para tanto ¡DÍMELO!
Y sí, Rise of the Resistence es increíble, lo nunca visto, alucinante, te explota la cabeza. Y te lo dice uno que no es fans de Star Wars y que está viendo un capítulo del Mandalorian por semana porque se me olvida que la estoy viendo. ¿Alguien ha dicho hype?
Nadie, absolutamente nadie. Creo que el hype no ha matado esa atracción, como si la del Mario Kart en Universal Japan... pero volviendo a la lectura ¿Ya tienes ideas para un próximo libro/relato/o quien sabe?
Va a ser de humor, eso seguro. Es lo que me gusta y lo que hace falta ahora mismo. Y que alguien te diga que cuando leen un capítulo de tu libro antes de acostarse es el único momento del día en que se ríen con ganas después de un duro día de trabajo es muy bonito. Dicho esto, mi próximo libro va a ir sobre la muerte. En clave de humor, por supuesto. LA MUERTE. Y protagonizado por algunos personajes de El fin del mundo a cucharadas y otros nuevos.
Tratar la muerte con humor es una buena forma de acercarse a ella. Hablando de LA MUERTE ¿Cuál sería el epitafio que pondrías en tu tumba?
Uy, qué difícil. No sé... ¨Kylie tenía razón¨, "Comprad mi libro, por favor", "Ya os lo avisé".
La gente cuando alguien muere tiende a alzar lo que han hecho en vida. Pero no te mueras, por favor.
Lo intentaré.
Oz es un lugar lleno de psicotrópicos |
El comienzo del libro viene con homenaje a El Mago de Oz, ¿Cómo crees que podría ser una versión actualizada de la historia?
La versión actualizada de El Mago de Oz se parecería más a Wicked, con menos baldosas amarillas y más políticos corruptos. Y, por supuesto, las baldosas amarillas no llevarían a ninguna parte. Sería menos colorido y más distópico, pero con alegres canciones.
Esto se termina, pero antes te dejo un espacio para que digas lo que quieras.
Me gustaría decir que un libro de humor no es un libro de chistes. Y que además de comedia romántica hay más tipos de humor. Y que hay que reírse más.
Cuando vuelvas por España, espero que me firmes el libro.
Por supuesto. Y ojalá sean dos o tres 🙂
O te vemos haciendo una firma en el Fnac a lo Fangoria
¡En el escaparate! No creo, a los autores autopublicados nos cuesta más que nos pongan en los escaparates. Pero podemos tomarnos un café y hablar de pop.
Sea como fuere, que el fin del mundo a cucharadas siga su conquista del mundo y que el pop siga dándonos alegrías. Ha sido un placer.
¡Igualmente! Me han gustado mucho las preguntas. Es la tercera entrevista que me hacen y sin duda la más original. Jaja, que así sea. Y si no me hago un Wandavision 🙂
Y me monto mi propia sitcom.
Como decían en Elizabethtown "Conmigo rompieron el molde", querido.
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