Become A Light / Eagle-Eye Cherry regresa a sus comienzos enganchando con quién es realmente

En un momento que estamos todos más conectados, que tenemos más información, que podemos acceder a las redes sociales de todo el mundo... y es cuando más se pasa a veces los lanzamientos de discos. Así me ha pasado cuando me he enterado que el sueco Eagle-Eye Cherry ha lanzado su nuevo disco, Became A Light (Papa Cherry Records, 2025). a finales de verano. He seguido los pasos de este hombre desde sus inicios, más allá del hit que fue Save Tonight.

Eagle-Eye Cherry nació en Estocolmo en 1968. Su madre fue la artista Moki Cherry y su padre fue el músico de jazz americano Don Cherry. Neneh, su hermana, y él crecieron en Scanian. Su padre moriría en el año 1995, motivación por la que Eagle-Eye acabaría escribiendo y creando su primer disco, Desireless (Diesel, 1997/Polydor, 1998), que incluía grandes singles como el reconocido Save Tonight, uno de los grandes éxitos del pop, Falling in love again o Permanent Tears entre otros. Llegarían dos discos posteriores: Living in the Present Future (Polydor, 2000), que tenía los singles Are you still having fun? y el dueto con su hermana (Neneh Cherry) Long Way Around y Sub Rosa (Polydor, 2003) con Skull Tattoo y Don't give up como sencillos. 

Tras él hubo una temporada de silencio a nivel de discos, aunque sacó un disco en directo llamado Live and Kicking (2007), y no sería hasta Can't get enough (Papa Cherry Records, 2012) cuando llegaría su cuarto disco de estudio. Seis años después llegaría Streets of you (Papa Cherry Records, 2018), y poco antes una versión de su Save Tonight veinte años despues de la original, y hasta cinco años después no le escucharíamos con el álbum Back on Track (Papa Cherry Records). Sólo dos años despues nos entrega este Become A Light que supone un salto en su carrera.

Para este álbum, inspirado en parte por su infancia de gira con su padre Don Cherry, hay una diferenciación ya que existen dos mitades: la parte que ha realizado con su productor habitual, Peter Kvint, en Suecia y la otra parte creada en Los Ángeles que ha hecho junto a Jaime Hartman y Mark Stoermer (Bajista de The Killers) con lo que se ha producido una mezcla entre el rock americano con la tradición sueca y donde ha regresado a sus raíces rockeras y postpunk

Son 9 canciones, siendo con diferencia su disco más corto, pero en el que parece que ha vuelto para reencontrarse lo que realmente le interesa de la música. Así los singles que lo han presentado Hate to Love y Chasing Down A Dream tienen una tendencia luminosa como la canción que abre el disco, Just Because, quizás las más festivas a nivel melódico porque el disco después va viajando entre canciones más íntimas como Long Way Home, de las de escuchar en un coche mirando por la ventanilla como pasan los árboles, o la guitarrera Remember What You Did Last Night. Toda la segunda parte del disco me llevan a su debut, Desireless, que denotaba una sensibilidad muy especial, así me resuenan Call this love o Salt in the Wound. Mientras que en Anywhere but here parece haber creado un himno rockero atemporal. El cierre lo hace con la canción que da nombre al disco, Become A Light, una preciosa balada que invita a soltarnos: "Become a light And everything is different now And everything is different"

Escuchando Become a Light casi a finales de año me ha transportado a una serie de momentos a lo largo del año, como un optimismo, nostalgia, y llevándome a lugares que ya he estado y transitado.