12 de octubre de 2011

Amaral | Salvajamente guitarrero


Nunca he entendido el problema que ha habido con Amaral. Y me explico. Que si es un buen grupo, que si vende, que si ahora deciden pasarse a publicar sus propios discos con su discográfica. Es decir, hacen lo que les da la gana. Siguen teniendo su seña de identidad en las canciones, cosa que no han perdido.

Además no sé si es algo que alguien se haya dado cuenta pero el precio de su disco, bajo el nombre de Hacía lo salvaje (Discos Antártida, 2011) es bastante bueno: la edición doble con libreto está a 15,99€, y la normal no alcanza los 12€.

De nuevo nos encontramos ante un puñado de sentimientos tirados en una sopa y recogidos para crear las canciones que conforman su primer album de estudio desde hace tres años.

Huele a nuevo pero antaño a la vez. De desamores, de huidas, de querer volar lejos, de superación, de caer a lo más hondo para tratar de levantarse. 

El album se abre con Hacía lo salvaje, el single presentación, una huida del ruido de la ciudad con un tono bastante épico que va in crescendo al paso de los segundos de la canción. A destacar el videoclip donde ellos no aparecen, sino que más bien parece sacado de un documental de La 2 por la tarde: Seguir a una tortuga desde que nace hasta sus aventuras acuáticos a lo Buscando a Nemo.


Quizás es uno de los temas que más se alejan de su estilo habitual, lo cual puede ser arriesgado para sacarlo como single, pero creo que ya tienen superado estas pequeñas cosas tanto Eva como Juan. Después encontramos temas como: Antártida -que da nombre a la discográfica que se han montado y con la que sacan el disco- ya vemos de nuevo el ritmo del habitual Amaral. Montaña Rusa -una de mis favoritas del disco- sobre algo tan sencilla como las vueltas de la vida y la necesidad de encontrar nuestro espacio. Si las calles pudieran hablar, sigue con una tónica donde vemos la historia que se nos cuenta por medio del sufrimiento de su protagonista.

Lo que uno nota con una sola escucha es como si el sonido se haya "asalvajado", muy irónico decir esto con un nombre del disco como el que tienen. Parece que esas melodias tan inmediatas que habia en discos anteriores (Sobre todo en Estrella de mar o Pájaros en la cabeza) se han perdido, a favor de canciones que van ganando en cada escucha. Para unos paladares más relajados, que dejan reposar y que acaban calando.

Encontramos temas como Cuando suba la marea donde queda claro las guitarras han tomado mayor protagonismo por encima de otros elementos o instrumentos que a veces la dejaban en un segundo plano. Hoy es el principio del final, vuelve a ser un tema que va creciendo poco a poco y donde la voz de Eva se vuelve más musical que nunca, siendo un instrumento más.

Sobre esto es algo que ya avisaban en entrevistas prevías al lanzamiento del album: la voz de Eva ahora también iba a ser como un instrumento más, menos plano y más musical. En algunos temas esto se nota cada vez más.

Amaral vuelven a hacer un buen disco, sigue sonando a Amaral, tienen ese toque otoñal de tristeza, desesperanza en ciertos momentos, han hecho un giro hacía algo más guitarrero, más musical y menos estribillos fáciles inmediatos.

1 comentario:

  1. Nunca me han entusiasmado pero "Hacia lo salvaje" me parece una de las grandes canciones del año. Quizá por no sonar tanto a ellos, no sé. Pensaba que el videoclip era aquella animación con la letra que sacaron cuando se filtró el tema. No conocía éste de la tortuga, fascinante es poco. La tortuga sobreviviendo a los depredadores y llegando siempre al mar. Brutal. Habrá que escuchar el resto del disco.

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