Y ahora voy a empezar a vivir de aquella manera que tu querías que no hiciera

Ding Dong Ding: se ruega a los señores pasajeros que se pongan el impermeable para poder leer las siguientes líneas, la crónica de la excusa de bajarnos a una tierra con encanto para ver al grupo que nos gusta. Pues si, te vas a una ciudad a estar 29 horas y 30 minutos, con gente maja, divertida, donde no paras de reirte para ver a Ellos, Ellos en Granada, dentro de la sala Planta Baja -si, porque la sala de conciertos, lo habeís adivinado, está en la planta baja- aunque la historia de este concierto creo que la deberíamos contar partiendo de un festival como fue el Extratoris el pasado mes de noviembre, donde también estuvieron actuando y recai casualmente, algún día contaré que pasó ahí, porque fue una noche realmente increible.

Sea como fuere allí estuvimos puntuales, incluso llegando pasada la hora, con un diluvio universal que decidió asolar toda la ciudad en esa tarde, quien sabe porque estaba provocado, aunque algunas teorías podrían dejar a más de uno sin aliento. Y allí finalmente entramos para seguir dados a esa cosa llamada alcohol para entrar en calor y que nos pusieran un sello cual ganado para poder asistir a la actuación.

El concierto empezaba más tarde de lo esperado y venían dos teloneros en el pack, a los cual, sinceramente nos podíamos haber ahorrado, especialmente los primeros: Chinyi, nombre extraño, para grupo raro, que ni Manos de Topo o algún otro grupo extraño puede superar, lo más interesante según nuestro pequeño pero importante grupo la camiseta de Mickey Mouse del que llevaba el ordenador y que le querían rapar el pelo, vamos, que estábamos atentos a lo que tocaban, mientras el cantante aporreaba una bateria, en plan como un descosido. Quizás en versión de estudia suenan bien, yo os lo dejo, que de momento a día de hoy no me he atrevido a hacerlo.

Los segundos parecían sacadas de High School Musical, según el que aquí escribe, o según otros de los Jonas Brothers, si es que a nosotros unas cañas nos suben que da gusto y estamos ingeniosos, se llaman Sueter, y faltaban el resto de complementos: pantalones, calzoncillos, zapatos... que se quedaron perdidos en algún lugar, si, estas frases las robo de personas que las han dicho pero que ellas mismas se darán por aludidas si leen estas líneas, que son homenajes. No les escuchamos demasiados, al menos yo, pero creo que prometían más que los primeros, al menos con una mayor musicalidad.

Entre tanto visitas al piso superior, más barra, charlas... hasta que por fin se prepara el plato fuerte de la noche, y allí suena "Esto no es un Adios", que es ese comienzo épico de su último disco y entrante de sus conciertos que hace que la gente se anime, para enlazar a un ritmo frenético con el comienzo de para mi el gran hit directo al corazón y con mala leche que es "Paso de ti", y allí está Guille Mostaza ¡sin bigote!, por fin, hay que reconocer que no le quedaba demasiado bien, pero ha vuelto a su origen afeitado.

La parte divertida del concierto, que no se como estaba el resto de la sala aparte de no en exceso llena, era que las dos primeras filas en las que estábamos nuestro grupo, estábamos entregados por completo a los compases del tema, de Guille, Santi Capote y el resto del grupo en directo, pensé que moriría aplastado contra el buffle que tenía justo delante de mi por los empujones de mis amigos, o que Guille moriría electrocutado por el charco que se había formado, pero la cosa no llego a mayores, no diré quien de nosotros dijo eso de "Guille vas a morir electrocutado como Edie Britt", aunque también teníamos al grupo salidorro que decía que se quitara la camiseta, yo sólo quiero que se la quite Javi Mateo, pero no es plan que montando y desmontando el chiringuito se lo pida.

Y he de decir que ha nacido una nueva estrella en el firmamento pop, es Quiquelín "Superstar", al cual el mismísimo Sr. Mostaza le subió al escenario para que cantará con él algunas líneas de Tu primero, con todos nosotros a sus pies, pasaros por el enlace para ver una foto en la que creo que la palabra felicidad se describe.

También tuvo un momento de bajarse con su gente al público y quedarse entre nosotros a cantar algunas líneas de otra canción, como somos formales, no le acosamos ni nada por el estilo... la desgracia del concierto fue que se redujo a once canciones, y creo que provocado por el retraso de los conciertos, igual que que no se llenara la sala pudo ser por el tiempo con granizada incluida, añadido a que no existía la venta anticipada que provocaría pereza a los que no tuvieran claro el asistir.

Pero nosotros nos daba un poco igual todo, y aseguro que lo disfrutamos, aunque se nos quedaron en el tintero "Dicen que te vas", "Vente si puedes" o "Lo dejas o lo tomas", eso si, con la buena costumbre que hay en los conciertos de subir a cantar "El Regalo", si, otra vez, lo hice, pero esta vez en muy buena compañia, amigo, colega, y otro fan fatal, el famoso que subió antes, a cuarteto micro en mano.

Agradezco a todos que ya saben este viaje, por el soplo de aire fresco y por las carreras bajo la lluvía que parecía que estábamos metido en Club de Fans de John Boy de Love of Lesbian completamente...

Y porque la sintonía que ha sonado y que me recordará será mágica

¡GRACIAS!

(Espero que hayan tenido un buen vuelo, ya pueden despojarse de los chubasqueros. Deseamos verles en próximos trayectos terrenales)

*La primera fotografia, hay dos versiones sobre que es lo que le pasaba a Guille, la que defiendo yo es la de "Ohh dios mio estoy viendo el moño de Lady Gaga" o la del que empieza con D., y también anfitrión, que también tenía toda la razón "O como algunos fans se acercaban y estaban a punto de meterse en el escenario... Get away!!!!"