[ Perfidia / Undershakers: El pop punk del final del milenio y de una era ]

 

Del lat. perfidia. 1. f. Deslealtad, traición o quebrantamiento de la fe debida.

Quizás mi yo que apenas había superado la mayoría de edad no sabía que casi veintitrés años después. 1) Seguiría vivo. 2) Seguiría escuchando alguno de esos discos que marcaron su post adolescencia. De Undershakers he escrito varias cosas por estos lares, como un recorrido por su disco Vudú y otro de su trayectoria. Hoy vengo a hablar del que fue su último disco, y quizás mi favorito: Perfidia (Subterfuge Records, 1999).

12 canciones donde de nuevo el español y el inglés se entremezclaban para dar lugar a canciones con ganas de hits. Recuerdo verlas en directo en la Fiesta Stereoparty Fin del Milenio que celebraron en La Riviera de Madrid junto a Los Fresones Rebeldes, con la formación de Éxitos'99, las recién llegadas Deviot y los Mercromina. Allí las canciones sonaban aceleradas, vibrantes, porque pasaban del ritmo más pop del álbum al rollo más punk que ellas siempre habían llevado.

El single con el que presentaron el disco fue Radar de Amor, con un videoclip que creo que no quedó a la altura de la canción, y también hubo un single promocional -de la época en la que se mandaban a las radios- con El Amor Perfecto. Era un contraste de dos formas muy diferentes de ver el amor: En Radar de Amor hablaba del romanticismo, de seguir a esa persona sabiendo que había una conexión entre ambas. Mientras que en El Amor Perfecto obviaban por completo la realidad, se metían en un mundo de fantasía, para refugiarse en las películas de la cruda realidad que hay fuera de la ficción.

El disco se abría con Dime sí donde las rupturas, darnos cuenta tarde de las cosas... y hablar de posibles nuevas oportunidades "Pero si ya lo sé que no hay dos sin tres". De los 12 temas, cuatro se reducían al ingles con canciones preciosas como Take Me que desde su melodía a esa letra tan tierna, no había forma de quitársela de la cabeza: "If you whisper in my ear that you love me I feel happy inside me". También hay tiempo para ritmos más pausados, medios tiempos, como Solo ahora: Una canción que ya hablaba de la aceptación y la superación de gilipollas de la vida ("Ya acepté tus modales ejemplares").

Como fan de Disney me hizo mucha gracia No soy Cenicienta que vista con el tiempo a lo mejor de lo que hablamos es de un fetichista de los píes... y no de otras cosas. Aunque hay una respuesta sobre el príncipe azul que puede ser esa persona. Que los cuentos, cuentos son pero en ocasiones había historias que salen. A veces no de cuentos si no de otros lugares. Illusions Gardens perdidos en una imaginación, en un lugar en el que nada te puede molestar, donde puedes disfrutar de las flores y perderte en ellas. Me divierte analizar discos con años de diferencias porque empiezo a ver cosas que antes no veía en ella.

Otro medio tiempo bonito es el de Cuestión de tiempo, que tiene ese aire despreocupado en sus melodías pero en la que hacen su propio análisis de como son, de lo que quieren. Esto es lo que hay y ser feliz como uno es, siendo así, sin depender de otra persona. En forma de balada tenemos Con la boca muy pequeña o como decir algo contrario a lo que hay en nuestra cabeza. La melodía nos lleva por esos parajes mentales de la confusión "Prudencia es no dejar que salga todo fuera".

Sacaban su lado más punk en Nada que contar sobre la repetición de la vida sexual, el aburrimiento de no innovar, "Siempre la misma historia, siempre en la misma posición". Like a Heroine en un homenaje a los hombres perfectos que son los super héroes pero con madres que dejan claro que ellas son las heroínas. El cierre es con Quiet Night que casi podría ser una banda sonora de una película de terror con esos teclados misteriosos que acompañan a la canción y el homenaje en el tramo final al Inspector Gadget.

Perfidia fue el cierre cuasi definitivo de Undershakers, producido y grabado por Dani Alcover, que ya había participado como co-productor junto al grupo en Vudú, a la par que estaba metido en el despegue de Dover [También estuvo implicado en el fabuloso Follow the City Lights]. Fue su último disco de estudio. El pop y el punk fusionados que siguen funcionando perfectamente con el paso de los años. Así que os recomiendo dar una nueva escucha.