3 de agosto de 2024

Cetina es Indi 2024 // El placer de un festival pequeño, bonito y de calidad


Creo que el año pasado perdí la ilusión por la música. No por escuchar música pero si por todo el ambiente de este mundillo. Varias decepciones importantes, cansancio y la sensación de que había llegado en un punto donde la inmediatez es lo importante, que no aportaba nada. Por eso hice el segundo intento de cerrar Confesiones tirado en la pista de baile, como una especie de crisis existencial. Pero este pasado fin de semana el haber estado en Cetina (Zaragoza) me hizo volver a enamorarme del pop, de la gente, de las bandas, de los amigos y saber porque me gustaba escribir. por aquí. Todo esto fue porque estuvimos en la segunda edición del CetIN: Cetina es indi. El Festival de música indi de Cetina (Zaragoza) que celebraba su segunda edición. El festival lo lideraban las bandas Galgo Diamante, Capitán Sunrise y Alcalá Norte.


El sábado por la mañana decidimos coger el coche desde Madrid a una hora buena: Sin madrugar ni saliendo a las dos de la tarde, para poder aprovechar la tarde en Cetina. Pusimos toda una sintonía de canciones pop, de aquí y de allá, [Si pinchas en el enlace te lleva a una lista de Spotify] cogimos la carretera para irnos en plan grupal hasta allí. En menos de 3 horas nos plantamos en el motel de carretera donde dormiríamos. Sólo estuvimos un rato ya que tiramos rápido pa' la piscina, como si nos estuviera llamando, para quedarnos tirados cuales ballenas varadas que cantaba SED

Que nos gusta un agua, que ¿es por qué venimos de estar nueve meses metidos en una tripa rodeados de agua? ¿Porque nadar nos relaja? A mí es que es algo que me intriga mucho, que veo una piscina y allá voy. Así que nos pasamos media tarde entre la piscina y esos maravillosos bocadillos, como el de pollo, que ponían en el bar de la piscina. Que además eran todos bien majos y agradables. Será que nunca he tenido pueblo y que todo lugar que lo refleje me gusta.

Posando felices en la piscina

Charlas sin trascendencia, otras con más, poniendo a parir también a algunas discográficas y artistas -con todo el merecimiento de las mismas, bien fundados y con argumentos- y también el cariño hacia otros grupos que hemos conocido y que es genial seguir viéndolos, disfrutándolo y gozándolo -también perfectamente argumentado y con todo el amor del mundo-. Salvando el mundo del pop mientras nos dábamos chapuzones y unas nubes nos animaron a que no nos insoláramos. Por allí estaban también miembros de los grupos musicales. Al menos reconocí ese primer día a las amigas de Capitán Sunrise, que incorporaban a Álvaro (Bajista) y Diego (Batería) al menos para este concierto, y a los Alcalá Norte que también se entremezclaron con la gente.

La felicidad también es ese bar de la piscina en el que había pinchos de todo tipo, después que si tortilla, que si un bacalao y, mi preferido, el bocadillo de pechuga de pollo. Por allí estaban buena parte de los Tiger & Milk, que fueron protagonista junto a Ripoll de la primera edición -Aquí se denota el buen gusto de los programadores del festival con la elección de bandas-, que ya me dijeron que ese bocadillo era de los mejores que habían probado. Doy fe de ello.

Diego en la puerta de la casa de los Capitanes, a la fresca

Es curioso que un festival que es pequeño trate mejor a los artistas que otros grandes. Bueno, voy a decirlo, que traten a artistas más pequeños mejor que otros festivales donde son casi un "Y da gracias que te traemos". Pudimos ver la casa de los Capitán Sunrise, su nevera, lo que les dejaron y más cosas que me guardo. Ojalá, de verdad, los festivales que van de apoyar la música indi [Aka los que van de indis pero después no pagan a muchos artistas] de este país hicieran esto. Otro punto para la organización. Yo ya me estaba enamorando y todo.

Parte de los capitanes en la escuela, castigados sin jugar en el jardín

Dimos una vuelta por el pueblo buscando una panadería fantasma, culpa de Google Maps, pero fue una excusa para ver a gatetes huir de nosotros tras hacerlos "psshh pssshhhh", ver donde estaba el escenario y escuchar un rato la prueba de sonido de los Alcalá Norte mientras los capitanes estaban sentados como si fueran niños castigados sin jugar en el recreo. 

Mirad que bonito que estaba el cielo

Después, entre gotas de lluvia que empezaron a caer, nos fuimos a sacar nuestras mejores galas ducharnos para volver de nuevo a Cetina y pasar un rato en la casa de los capitanes antes de salir para la escuela pública. Estuvimos viendo un rato, tirados en la cama con el aire acondicionado, las olimpiadas porque seguro que sabéis que soy amante del deporte [Se escuchan risas de fondo].

Un aplauso para el técnico de sonido

Allí había buen ambiente, musiquita y amigos, como Javier Castellanos (Salvador Tóxico) o Carlos (Videoterapia) y parte de amigos del pop de Madrid, que también estaban allí por lo mismo que nosotros. Debemos un punto extra al técnico de sonido que gritaba a todos los grupos, no por mala leche sino para que le escucharan ya que no tenía micro. De verdad, este hombre se lo curró tanto entre los gritos, subir al escenario varias veces para ver si estaba todo bien... Qué gente currante. Sí, es el hombre que veis en la foto sobre estas líneas.

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GALGO DIAMANTE



Galgo Diamante. Vamos a ver., ¿Pero esta gente por qué no tiene nada publicado? Este festival ha tenido tres escenarios, de forma metafórica, el primero de ellos con este trío barcelonés. Galgo Diamante, formado por Sebas, Dalía Max sólo tienen publicada una canción que está en su Bandcamp/Soundcloud y que es un directo: Mal Menor. Es decir: El escenario del descubrimiento, al menos para mí que ya habrá gente que los conocía. Rotundos, sonoros y con unas letras que dicen muchísimas cosas.


Lo que escuchamos aquel sábado fue tan prometedor, y a ellos se los veía muy felices en el escenario. Eso también es muy bonito. Según su setlist, que pedí a Dalía justo al terminar el concierto, las canciones tienen los nombres de Amics, Nada de mí, Baja laboral, la mencionada Mal Menor, Tu Ser, Cuchillos, Gris Oscuro, Las cosas cambian, Pistola, Nada de lo que sucede y La Misión... Varías de ellas, si no recuerdo mal tres, estaban casi recién salidas del horno y era la primera vez que las tocaban en directo.

"Festivales así son los que llenan la música y el corazón"

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CAPITÁN SUNRISE


Capitán Sunrise. Son el segundo escenario, el de los que llevan más de diez años en la escena independiente y siguen siéndolo. Llevo escuchándolos catorce años, es decir, desde que nacieron. Los vi en el Contempopreanea 2010 y les compré su maqueta (Corazón de Superhéroe) a Pili. Recuerdos a Pili allá donde esté. Con Santi Campillo a la guitarra Diego a la cabeza, creador del grupo y único miembro superviviente, nos encontramos a una banda con Noelia Cabezas, Paco Cuenca y la llegada de Álvaro y Diego que, espero, que se queden tiempo con ellos. 


No sé si se lo pasaron ellos mejor que nosotros, la verdad. Porque las primeras filas éramos entregados a la causa, nos sabíamos todas las canciones y lo cantábamos como si no hubiera un mañana. El repertorio se dedicó la mitad a su último disco, Playlist para un Apocalipsis (Subterfuge Records, 2023), y la otra mitad a temas del pasado aunque teniendo que cargarse temarracos como El chico más guapo de la galaxia, Confesiones de un tarado emocional, Luna Roja y más hits. Eso sí, Dramas del Primer Mundo, o Bésame antes de que cambie el gobierno allí estaban.

En el escenario subió un Nacho "Tiger and Milk" a cantar con ellos Campaña Electoral, un tema que compuso el propio Nacho y que no sabía que hacer con él. Lo hizo como una popstar, una Kylie Minogue patría... De verdad, esa entrega de felicidad absoluta que tenía. La misma que Paz y Bea cuando se pusieron a hacer coros y bailes en Supermán Enamorado. El concierto tuvo en su recta final los clásicos de Bésame antes de que cambie el gobierno y el Súper Plan B



"Somos intensas y bonitas"

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ALCALÁ NORTE

Alcalá Norte. La mezcla entre una actitud de su cantante con Los Punsetes, aunque si se movía pero sólo hablaba para cantar, mientras que su batería se convertía en el "front man" de la formación que por momentos pensé que acabaría diciendo "Y ahora tenemos en la ruleta...".  Como no tenían más repertorio que el que tocaron, cuando llegó el momento de hacer los bises regalaron lo mejor que se puede hacer en estos casos: Repetir las dos canciones que más quisiera el público.

El grupo se centró en su LP de debut, Alcalá Norte (music shadow/ baiaunka, 2024), que contiene una gran cantidad de himnos pegadizos. Sobre el escenario juegan con las actitudes que antes he dicho pero también manteniendo ese concepto de himnos sobre el directo. 

Algo que es de recibo contar es que no cancelaron esta fecha. Cuando el festival les contactó aún no habían pegado el petardazo que les ha hecho convertirse en uno de los grupos revelación en este 2024, pero ellos dijeron que éste había sido el primer festival que había confiado en ellos cuando no estaban en la cresta de la ola, y ahí lo dieron todo. Algo de agradecer. 

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Entre los conciertos había también música y sonaron un par de remixes-mashups de David Van Bylen. Desconocía el FABULOSO mashup entre Años 80 de Piratas y el One More Time de Daft Punk. Además viví ese momento con chico desconocido, bigote bonito, simplemente unidos por la música cantándolo dándolo todo. De verdad. Estas cosas. Estas cosas de la vida bonitas. También pincharon un remix de Toda la noche en la calle de Amaral que suena la mar de bien.

La noche seguiría con varios DJs, como Man Pop que el mejor de la noche, unas cervezas más, un dar una vuelta a comer alguna cosilla, y ver a un señor disfrazado que salía en el escenario pero que no teníamos claro que significaba. Al parecer mis fuentes me confirmaron que también estuvo el año pasado. Aguantamos ahí hasta pasadas las 4 de la mañana termina cuando sonó una versión de Qué nos va a pasar de La Buena Vida.

Al llegar a nuestro motel: la oscuridad. Había que llamar a un teléfono cuando llegáramos para que nos abrieran. Así que allí estábamos a las tantas de la mañana llamando para que nos abrieran las puertas... como si fuera una mansión. Eso sí, caimos en la cama rendidos y fresquitos al fresco del aire acondicionado. 

La mañana siguiente decidimos volver a pasarla en la piscina de Cetina donde se entremezclo el desayuno-la hora del vermú-la comida-y los baños en la piscina. Pudimos reencontrarnos con los amigos de Capitán y también con Galgo Diamante a los que nos acercamos cuales tiburones en busca de presas en la piscina simplemente para decirles que nos había encantado su concierto. Algunos se compraron las camisetas que, finalmente, vendieron absolutamente todas.

Después de comer nos despediríamos de Cetina que nos ha dejado una bonita marca. De nuevo disfrutar de un festival pequeño, sin masificar pero con una muy buena selección de grupos. Por momentos nos sentimos como si estuviéramos en aquel Contempopranea en Alburquerque, exactamente en la fiesta de presentación que se hacia en la plaza del pueblo. 

Así que necesitamos que el Cetina es indi tenga una tercera, cuarta y quinta edición. Desde aquí ya dejamos caer que en 2025 ojalá estén Detergente Líquido entre los grupos del cartel ya que tienen un disco, Si en verano estamos solos, a punto de caramelo donde incluyen una canción, Opel Corsa Negro, en la que colabora Nadie Patín. Otro de los grupos que bien podríamos ver en este festival que tienen un LP debut contundente de nombre Nadie Patín (Calaverita Records, 2023)

Cetina es indi ha sido la chispa que ha reavivado mi amor por el pop y volver a escribir por aquí. También culpo a Detergente Líquido, con lo poco que me funciona el chantaje emocional y lo bien que da Félix a la tecla en Twitter, y Alex Pler, compañero blogero, escritor y muchas más cosas que con una sola frase me hizo pensar..

¡Viva el Cetina es Indi! Puedes seguirlos en Instagram.

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