[ Androide ] Pains y la angustia de una sociedad perdida en el siglo XXI

Pains firma su trabajo de debut alejándose del ritmo electropop del grupo Dorama, del cual forma parte, para darnos una visión pop de la actualidad en forma de cinco píldoras que nos saquen de nuestro particular Matrix. Así es su EP debut que se llama Androide (Autoeditado, 2019) que forma parte de su TFG sobre sociología robótica.

Así las cinco canciones van a reflejar aspectos de la actualidad desde diferentes perspectivas que, dentro del aspecto festivo de varias de las canciones, incluyen reflexiones profundos. Así sucede en la canción que abre el disco Manifiesto Androide: Nos mete de lleno para que veamos la modificación de la comunicación y la búsqueda de los sentimientos en un mundo que está completamente devastado emocionalmente. A esta le sigue Virales que refleja lo efímero de ciertos personajes, de la sociedad consumo a lo fast food que tiene cada vez un tiempo de caducidad más corto. "Son virales no son famosos eternos", como un perfecto resumen que tienen un tiempo de caducidad. Además ha hecho un vídeo con todas las referencias, por si alguno es de una generación diferente y no lo pilla.

Pasamos a la importancia de los humanos en No somos nada. Pero no como seres humanos sino como un concepto económico en forma de números y datos para que las empresas y líderes de los países consigan atraer una mayor ganancia. La deshumanización a favor del aumento de beneficios en las personas ricas. Después llega El lamento del robot donde comprobamos que el vacío existencial de no saber lo que se quiere o lo que, hace plantearse a un robot su falta de sentimientos y ¿Qué es lo qué hace aquí? ¿Cual es su propósito de vida?.

El final nos deja con un poso de desubicación, el sin sentido y la perdida de significado, porque cada vez hay menos diferencia entre los robots y los humanos que van en el mismo camino. El futuro ya está aquí y lo canta Androide Estropeado.

Con influencias de formaciones como La Casa Azul, Nancys Rubias, Depeche Mode, Astrud y una buena parte del indie pop nacional, Pains hace honor a su nombre para reflejar la angustia de una sociedad perdida en pleno siglo XXI

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