El prolífico Luis DH ya ha salido a la carrera en su nuevo disco, Metapop (Vodka Cat, 2019). Bajo el epígrafe de "Cry, dance and make love to it" nos llegan 17 nuevas canciones que, como viene siendo habitual, tratan de sacar lo mejor de él. Algunas ya las habíamos ido conocido en los últimos meses a modo de singles de avances... pero el disco nos deja muchas más sorpresas que hasta ahora no habíamos escuchado.
Todo comienza con Let the games begin, ¿quizás un homenaje a Los Juegos del Hambre pero en un modo mucho más amoroso?, donde su electrónica suena potente, directa y concisa. Pero es curioso que a medida que uno va pasando de canción en canción se encuentra con tantos estilo dentro del mundo de la electrónica y el pop. Es algo que ya se veía en el anterior álbum, Afterlife (Vodka Cat, 2018) y que nuevamente aparece en éste.
Así nos encontramos con baladones como Back to me, intensos, cercanos e íntimos con un ambiente espacial o ese rollito cuasi tropical de What you want from me. En otros momentos decide desnudarse, de la electrónica, para ponerse guitarra en mano y cantar en español como en Super Tú. Es el primer disco de Luis DH en el cual ha incluido temas en castellano, aunque ya hubiera por ahí alguna canción, autoversión de canciones suyas o versiones ajenas (como En tu lista de Ellos o Dulce Locura de La Oreja de Van Gogh, realizadas para este blog). Junto a Super Tú tiene Bien Dentro, cuyo nombre es bastante prometedor... y su letra también.
Más guitarra en mano en Found a cure, salta a más electrónica a modo de pelotazo en Comadonia y la ochentera Fantastique que se pega a una primera escucha. Claro que, quizás, una de las sorpresas más grandes llega con Brillo: un ejercicio de canción eurodance con toques a los Ellos y cantada en español. Fantasía pura y dura.
Comentar los discos de Luis DH es algo complejo por la capacidad que tiene de entremezclarse, fusionarse, ir cambiando de década musical en un mismo disco y hacer sus propias referencias. Metapop tiene un nombre muy adecuado para el disco. Pop dentro del pop y más allá. Una colección de 17 canciones que logra llevarnos por su particular universo que, poco a poco, sigue expandiéndose... como si fuera el Universo Marvel.
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