24 de diciembre de 2020

[ '¡Qué nervios de repente!', Inconsciencia Artificial diciendo, de forma divertida, verdades como puños ]

 

Se han tomado su tiempo pero Inconsciencia Artificial han publicado hace unos días su segundo disco. ¡Qué nervios de repente! (Autoeditado, 2020) es el nombre de su segundo larga duración. 9 canciones que vuelve a hacer ese electropop deshinbido, con letras divertidas... y un trasfondo mucho más serio del que puede parecer tras esas risillas.

Distorsión dental, como una visita al dentista puede dar para tanto ¿Será la anestesia la que produzca estos pensamientos?. Sin afeitarme y de botellón, es una historia de amor en medio de un botellón en plena calle. Hay hasta un plot twist inesperado en la historia. La Maruja Moderna es una actualización de la figura de la maruja, han descubierto que al final casi todos somos unas marujas. Me he desviado del plan es un homenaje a esos bares que realmente nos gustan, esos de toda la vida... por encima de esas finuras de gastrobares. El bar, ese lugar perfecto para dejar a un lado la vida real. 

Interfaz con Humanos es una visión sobre el futuro en el que tendríamos relaciones con los robots, con todas las ventajas que tienen por encima de la inestabilidad humana. ¡Qué nervios de repente!, la canción que da nombre al disco, nos acaba diciendo que en esta vida hay que elegir: si quieres comerte un menú del McDonalds o tener un tipín perfecto. Yo elijó el menú del McDonalds. Sin dudarlo. Tu vecino en la taberna, la ficción ha idealizado la figura del ser malvado. La realidad hace que la maldad puede estar en cualquier lado y la censura se encuentra dentro del propio pueblo. La Zona Perianal es la oda a la no depilación... y mucho menos en la zona perianal. Entre el dolor y el dinero apañados vamos. El cierre del disco llega con En un mundo tan moderno, un lugar en el que teniendo toda la variedad de elementos para ver y hacer, nos encontramos con una nostalgia del pasado viendo pasar la vida.

¡Qué nervios de repente! parece muy de broma entre la música y las letras. Estas últimas esconden realmente mucho más: desde los nervios que produce el dentista (y las paranoias que se nos pasan por la cabeza), la nostalgia de las épocas de botellón, reconocer que todos somos unas marujas, el gusto por los bares de barrio, la búsqueda de la perfección en los robots, la obligación de esta sociedad a que tengamos un cuerpo perfecto, la maldad en el mundo que la tenemos al lado, el odio a la depilación, hasta el aburrimiento de la vida ¿A qué así suena mucho más serio? Pues de todo eso hablan los Inconsciencia Artificial.

Este disco revela a Feos, pero muy sintéticos (2016), su primer disco, aunque entre medias han llegado más canciones, como Una Presencia Aterradora o la versión que hicieron del Chicos de Miriam Díaz Aroca para este blog.


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