"Hay gente, como Nacho Camino, que hace canciones muy bonitas y que casi nadie lo sabe" decía Alberto Rodway (Detergente Líquido, Que bailen los demás) hace poco en sus redes sociales. No sé si casi nadie lo sabe o mucha gente lo conoce sólo sé que merece la pena descubrirle. Este año ha publicado su tercera referencia discográfica, Una trampa para pájaros (Grabaciones Estelares, 2017).
Kalenda Maya juega más con el "ruido", un poco de caos, más intensa, como si fuera la canción que toda película de Disney deja cantar al villano. Mebrana, sus palmas, piano y la voz nos llevan en un viaje de subidas y bajadas, que van al ritmo de la letra y la melodía, mientras que Una trampa pájaros, que da nombre al EP, tiene ecos de un bolero decadente donde habla de como en realidad no tenemos toda la libertad que aparentamos, o creemos, tener.
Si todo el EP tiene encanto y sabe usar diversos tonos, hay que llegar al último corte para descubrir un final a lo grande con Dios estuvo aquí, una canción llena de sentimiento, con una melodía que parece que te acompañe en aquel último baile que nunca llegaste a realizar, con la sensación de una nostalgia futura, de un amor que aún no ha llegado, como si fuera un vals eterno. En especial esta canción va a lo mejor de mi año, porque sí, porque me dice, me transmite y me dice cosas.
"Si al llegar te recibe un silencio de piedra, tal vez
te sientas perdida.
Y en la noche más larga quizá no comprendas
por qué
no hay luz ahí arriba.
Sólo quédate quieta y oirás un rumor que te alcanza.
Desde la frontera
que te separa de mí"
(Suspiro)
(Suspiro)
Gracias por compartirlo. Impresionante.
ResponderEliminarDios estuvo aquí es una canción prodigiosa
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