"Mi cuento empieza una mañana, me desperté y no tenía ganas", casi como el comienzo de Una Mañana de Pastora podría ser el planteamiento, de forma indirecta, de Cero (Ediciones Oblicuas, 2014), la nueva novela de Aitor Villafranca. Es la segunda que publica, tras ganar el Primer Premio Narrativas Oblicuas 2011 con Zodiaco (Ediciones Oblicuas, 2012).
Alex y Daniel despiertan en una habitación, los dos juntos en la misma cama. Alex sale a la calle y se encuentra con una ciudad extraña donde hay colores que salen de los pies y las personas no son lo que él recordaba que eran. Mientras, Daniel sale a "la realidad". Ésta está dispuesta a darle unos cuantos golpes en el día de su cumpleaños.
Alex y Daniel despiertan en una habitación, los dos juntos en la misma cama. Alex sale a la calle y se encuentra con una ciudad extraña donde hay colores que salen de los pies y las personas no son lo que él recordaba que eran. Mientras, Daniel sale a "la realidad". Ésta está dispuesta a darle unos cuantos golpes en el día de su cumpleaños.
La novela nos sitúa a dos personajes que son autodestructivos. Queda claro que ellos mismos no sienten aprecio por si mismos, y dudan que los demás puedan hacerlo en alguna ocasión. Usan el sexo como una válvula de escape, como una forma de intento de satisfacción. Da la sensación que no disfrutan de nada. Así ese día que se levantan juntos cada uno hará su vida, pero será muy diferente la una del otro, o ¿Quizás no tanto?. Un mundo, aparentemente imaginario-onírico, en el que Alex se perderá, y Daniel se enfrenta a la cruda realidad de acontecimientos que duelen cuando uno se convierte en adulto.
Aitor refleja en esta novela corta, sólo tiene 136 páginas, un gusto por los detalles, dentro de los cuales está meterse de lleno en la miseria que sienten sus protagonistas. Juega con ellos, los maltrata, les da patadas, y llega ese punto en el que necesitamos apiadarnos ante la situación en la que se encuentran... incluso en algunos momentos nos recuerdan a personas que orbitan a nuestro alrededor de forma más, o menos, inocente, pero escondiendo ese mundo oscuro, tenebroso y flagelador.
Todos nos hemos sentido perdidos o con una necesidad de cambiar la realidad en la que nos encontramos. Cero nos pone un reflejo para reflexionar y pensar, ¿A dónde queremos ir? ¿Qué queremos encontrar? ¿Estamos a tiempo de cambiar?
Aitor Villafranca es un chico de letras y ciencias con pinta de no haber roto un plato en su vida. Además de escritor, es Ingeniero en Telecomunicaciones y Doctor en Física que se dedica a trabajar en el apasionante mundo de la investigación. ¿Aburrido? Para nada ¿Creativo? Un no parar.
Cero es el final, y el comienzo, de un día, dos mundos diferentes, y una jornada de autodescubrimiento hacía un camino por recorrer. Para personas perdidas que no sepan si van a reencontrarse, aunque albergan ese deseo.
Cero se puede conseguir en librerías como la Casa del Libro, Berkana, o por medio de Amazon
Bonus Track: Entrevista a Aitor Villafranca, con unas cervezas en la mano /
Crítica del libro por Alex Pler en el blog Sombras de Neón
Aitor refleja en esta novela corta, sólo tiene 136 páginas, un gusto por los detalles, dentro de los cuales está meterse de lleno en la miseria que sienten sus protagonistas. Juega con ellos, los maltrata, les da patadas, y llega ese punto en el que necesitamos apiadarnos ante la situación en la que se encuentran... incluso en algunos momentos nos recuerdan a personas que orbitan a nuestro alrededor de forma más, o menos, inocente, pero escondiendo ese mundo oscuro, tenebroso y flagelador.
Todos nos hemos sentido perdidos o con una necesidad de cambiar la realidad en la que nos encontramos. Cero nos pone un reflejo para reflexionar y pensar, ¿A dónde queremos ir? ¿Qué queremos encontrar? ¿Estamos a tiempo de cambiar?
Aitor Villafranca es un chico de letras y ciencias con pinta de no haber roto un plato en su vida. Además de escritor, es Ingeniero en Telecomunicaciones y Doctor en Física que se dedica a trabajar en el apasionante mundo de la investigación. ¿Aburrido? Para nada ¿Creativo? Un no parar.
Cero es el final, y el comienzo, de un día, dos mundos diferentes, y una jornada de autodescubrimiento hacía un camino por recorrer. Para personas perdidas que no sepan si van a reencontrarse, aunque albergan ese deseo.
Cero se puede conseguir en librerías como la Casa del Libro, Berkana, o por medio de Amazon
Bonus Track: Entrevista a Aitor Villafranca, con unas cervezas en la mano /
Crítica del libro por Alex Pler en el blog Sombras de Neón
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